top of page

Un templo que representa la identidad nacional

BASILICA DEL VOTO NACIONAL: SIMBOLO DE PAZ Y ESPERANZA DE LOS COLOMBIANOS.

Por: Camilo Diaz Molano

Uno de los templos que para muchos colombianos  puede ser desconocido, es el de la Basílica del Voto Nacional, también denominada Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, la cual pertenece eclesiásticamente a la Arquidiócesis de Bogotá y encomendada a la Congregación de los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, llamados también padres claretianos. Se encuentra ubicada en pleno corazón de la capital de la Republica, más exactamente sobre la Carrera 15 entre calles 10 y 11, costado occidental del parque de los Mártires.

ORIGEN.

Este templo católico que tiene la categoría de Basílica Menor, surge mediante solicitud del entonces Arzobispo de Bogotá, el excelentísimo Monseñor Bernardo Herrera Restrepo (1844 – 1928) quien a raíz de los acontecimientos de la Guerra de los Mil días, que inició en nuestro país el 18 de octubre de 1899, solicita al gobierno del Presidente José Manuel Marroquín Ricaurte, construir un templo en honor al Sagrado Corazón de Jesús, aprovechando que el Santo Padre León XIII consagró el 11 de junio de 1899 el género humano al corazón de Jesús y a la vez lograr la paz entre los miembros y seguidores de los partidos Liberal y conservador.

La confluencia de los poderes políticos y religiosos se recrudeció en esta guerra, que dio inicio en octubre de 1899 hasta 1902, dejando unos 100.000 muertos (el 2,5% de la población), y que termino con el triunfo del gobierno conservador.

 

Según el portal web de la Basílica, “el gobierno de Marroquín Ricaurte colaboraría con la construcción del templo según el decreto 820 del 18 de mayo de 1902. Se argumentó que era deber de la nación hacer todo lo posible contribuir a la reconciliación entre los colombianos. Por eso se detalla que la construcción de este templo “serviría para encomendar el país a Dios y a contribuir a restaurar la paz y el orden”. Es por eso que en ese mismo año,se firma la paz a través de los tratados de Neerlandia (24 de octubre) y Winsconsin (21 de noviembre).

El terreno donde se pretendía la construcción del templo fue donado por la ilustre dama bogotana Rosa Calvo Cabrera en 1891, ubicado frente al obelisco y la Plaza de los Mártires (Construido en el Siglo XIX) Sin embargo no fue sino hasta 1902 cuando iniciaron los trámites para iniciar la obra. El diseño de estilo grecorromano fue elaborado por el arquitecto bogotano Julian Lombana Herrera (1839 – 1916). Con el fin de la Guerra de los Mil Días se inició la construcción, es por eso que el 22 de Junio se coloca la Primera Piedra para el templo.

En 1911 el Arzobispo Herrera Restrepo ofrece a los padres Claretianos continuar con la obra, que para ese entonces estaba inconclusa. Reto que asumen en 1912 y que culminaría en 1918. Hay que destacar la labor infatigable del sacerdote claretiano Antonio Pueyo de Val, quien después sería Obispo de Pasto, quien se puso al frente de las obras faltantes respetando los diseños del arquitecto Lombana.

 

El templo fue consagrado por el Arzobispo Herrera Restrepo el 24 de septiembre de 1916. En 1952 se instala y se bendice el altar, traído desde España. El Santo Padre San Pablo VI, la elevó a Basílica Menor el 5 de febrero de 1964. En 1975 fue declarada Monumento Nacional.

96.png
02.png

El Templo del Voto Nacional adquirió trascendencia para todo el país. Sandra Reina, arquitecta e investigadora de este Monumento, afirma que “la asociación entre este voto y el templo no es casual” argumentando que “la guerra estaba echando a perder la armonía entre política y religión que se creía, habían logrado Miguel Antonio Caro y Rafael Núñez, era una prueba del grado de polarización al que se había llegado entre los partidos, fundamentalmente en sus concepciones sobre la Iglesia y su rol social. Por eso hacer el voto por la paz en un templo era un gran símbolo”

El templo del Voto Nacional era el lugar propicio en el que el Gobierno Nacional en cabeza del Presidente de turno presidia el “Te Deum”, en el que se agradecía por la protección del país. Se hizo así hasta 1971, cuando la ceremonia se trasladó a la Catedral Primada y desde 1991 se dejó de celebrar a raíz del carácter aconfesional de la nueva constitución.

ARQUITECTURA

 

A continuación se expone el componente arquitectónico de la Basílica Menor del Voto Nacional, explicado en el portal web del Voto Nacional:

 

“En el campo de la arquitectura se tiende a decir que la iglesia del Voto Nacional es de tipo republicano. Es importante tener en cuenta que los periodos históricos de determinado lugar no equivalen a movimientos y expresiones artísticas. Se podría decir que la fachada de la iglesia es neoclásica al ser una apropiación del estilo neoclásico renacentista en Colombia de finales de siglo XIX y comienzos del XX.

Esta se compone de dos cuerpos que pertenecen al orden Corintio, el campanario que data de fecha posterior y rematando una estatua del Sagrado Corazón de Jesús que mide 3.38 metros. El primer cuerpo consta de la entrada principal y dos laterales, recordando las construcciones italianas inspiradas en los arcos del triunfo y dos ventanas, una a cada lado de las puertas laterales.

La columnata corintia es conformada por dos tipos de columnas: las separadas que se encuentran casi tangentes a un muro situado detrás, el cual es el verdadero soporte del entablamento y las pilastras que son representaciones en relieve de las columnas, labradas en el muro.

Las columnas separadas se encuentran en pares, en diferentes planos y a los lados de la puerta principal. El primer par de columnas soporta el frontón partido mientras que el segundo par se encuentra en un plano posterior a las primeras columnas. Las pilastras decoran el resto del primer cuerpo.

 

El segundo cuerpo lo conforman el frontón donde se encuentra el escudo nacional y dos arcos, uno a cada lado de este, que se apoyan sobre un pedestal. Sobre el pedestal, además de apoyarse las columnas, también se apoyan estatuas de santos y personajes del clero, a los extremos de los arcos laterales.

Finalmente, la fachada es rematada con el campanario de base cuadrada que se compone de un arco de medio punto en cada lado, y la cúpula, sobre la cual se encuentra una estatua del Sagrado Corazón de Jesús.

 

Tras el arco de medio punto de la fachada, se ve una puerta de madera que permanece cerrada. También es de considerar que el Padre Pueyo de Val mandó traer de Alemania un reloj para el templo, a la usanza de las grandes iglesias europeas, que se dañó a los pocos años de haberlo instalado y aunque se intentó reparar, no volvió a funcionar. Cuando servía, salía el Corazón de Jesús con la mano derecha en alto a bendecir a sus fieles cada cuarto de hora.

 

Al analizar la fachada de la iglesia, se puede ver que su proceso de construcción fue prolongado , pues el primer y segundo cuerpo de la iglesia forman una unidad mientras que el campanario, al parecer posterior, se asemeja más al de la iglesia del barrio Egipto” .

La Basílica tiene tres naves separadas por dos filas de columnas y arcadas. Presenta un estilo neoclásico y mide 17 metros de altura y 65 de profundidad.

 

Posee una planta en forma de cruz latina con tres naves y una cúpula de gran magnitud, situada en el cruce de la nave central con el transepto, que ha sido cubierta con material impermeable, lo cual oculta su transparencia y su construcción en cristal de colores con linternas estilo grecorromano. Debajo de ella, en el presbiterio, hay una escultura del Sagrado Corazón.

El templo cuenta asimismo con ocho altares, correspondientes a igual número de provincias con las que contaba Colombia durante su construcción. Las columnas de la nave central están rematadas por capiteles corintios que sostienen cornisamentos que definen arcos de medio punto, con plafones ilustrados con obras al fresco del pintor bogotano Ricardo Acevedo Bernal.

La confluencia de los poderes políticos y religiosos se recrudeció en esta guerra, que dio inicio en octubre de 1899 hasta 1902, dejando unos 100.000 muertos (el 2,5% de la población), y que termino con el triunfo del gobierno conservador.

Según el portal web de la Basílica, “el gobierno de Marroquín Ricaurte colaboraría con la construcción del templo según el decreto 820 del 18 de mayo de 1902. Se argumentó que era deber de la nación hacer todo lo posible contribuir a la reconciliación entre los colombianos. Por eso se detalla que la construcción de este templo “serviría para encomendar el país a Dios y a contribuir a restaurar la paz y el orden”. Es por eso que en ese mismo año, se firma la paz a través de los tratados de Neerlandia (24 de octubre) y Winsconsin (21 de noviembre).

 

El terreno donde se pretendía la construcción del templo fue donado por la ilustre dama bogotana Rosa Calvo Cabrera en 1891, ubicado frente al obelisco y la Plaza de los Mártires (Construido en el Siglo XIX) Sin embargo no fue sino hasta 1902 cuando iniciaron los trámites para iniciar la obra. El diseño de estilo grecorromano fue elaborado por el arquitecto bogotano Julián Lombana Herrera (1839 – 1916). Con el fin de la Guerra de los Mil Días se inició la construcción, es por eso que el 22 de Junio se coloca la Primera Piedra para el templo.

 

Por su ubicación, el sector se convirtió en los años 30 en una zona franca donde funcionaban el mercado de abastos (plaza España) y el Terminal de buses y de transporte de carga. Esto hizo que sus residentes tradicionales comenzaran a emigrar y sus residencias pasaron a convertirse en inquilinatos y hoteles, asi como bodegas para guardar mercancía. La evolución de la malla vial influyo en el cambio, en esto la obra de la avenida Caracas rompió abruptamente con la unidad entre el centro histórico de Bogotá y esta periferia.

 

Los desastres a raíz del Bogotazo en 1948 desgastaron aún más la zona y años después hacia la década de los ochenta, a una cuadra arriba de la plaza de los Mártires, surgió el Cartucho, la cual en 20 años se convirtió en escenario de los peores dramas de la ciudad: indigencia, asesinato, tráfico de drogas y prostitución. Al surgir a comienzo del 2000 el Parque Tercer Milenio el drama se desplazó al Bronx, a 60 metros del Voto Nacional.

 

 

Según la Revista Semana, en un articulo referente a la Restauración del Templo del Voto Nacional, refiere que a raíz de esta situación, la parroquia quedo en el olvido, tanto que en las misas dominicales difícilmente asistían 15 personas. El paso del tiempo contribuyó al deterioro de la fachada, el techo y la cúpula.

 

Es por eso que, a raíz del momento político que se vivió en 2016, como fue el fin de las negociaciones de la Guerrilla de las Farc y el desalojo del Bronx, el Distrito decidió renovar el Voto Nacional de 1902 al restaurar la Basílica.

 

Así, en el marco del Plan de Renovación Urbana Bronx, en septiembre de 2016 quedaron recuperados la plaza y el obelisco, y en noviembre del año pasado entregaron la primera fase de la restauración del templo, concentrada en el cuerpo y la superficie de la fachada con una inversión de 3.141 millones de pesos.

 

El Tiempo en nota del 8 de noviembre de 2019, refiere que desde el 2016 la Basílica empezó a ser rescatada. Las obras incluyen acciones para la recuperación de la fachada, contra-fachada, coro y sotocoro, además de la restauración del reloj cucú de este importante bien patrimonial, La inversión de esta fase fue de 3.141 millones de pesos.

 

En la actualidad se avanza en la segunda fase de intervención, con obras de restauración y reforzamiento estructural que incluyen cimentación de muros y columnas del presbiterio (área en torno al altar, un poco elevado, distinto de la nave), transepto y cúpula.

En esta etapa, los vidrios de la cúpula que conforman el tricolor nacional serán restituidos y los vitrales del sol resplandeciente (bajo la cúpula) también serán restaurados, así como las ventanas transepto norte y sur y vidrios de los rosetones. La inversión de la segunda fase es de 10.566 millones de pesos.

 

En esta fase intervienen 110 personas, entre profesionales, técnicos y ayudantes de obra. La segunda fase comenzó en diciembre de 2018, y para diciembre de 2019 se podrá apreciar la iluminación led de la cúpula. La cúpula que se entrega en diciembre es de vidrio, tal como era la original antes del Bogotazo, cuando la reemplazaron por una de concreto.

 

El padre Darío Echeverry es el actual párroco de la iglesia del Voto Nacional, la segunda en importancia después de la Catedral Primada de Colombia.

 

 

25.png
bottom of page